¿Por dónde empezar? Aterriza tus metas
No te subas a un camión sin saber a dónde va — aunque no estés seguro de cómo llega.
No te subas a un camión si no sabes a dónde va
Vas a terminar en Ecatepec cuando querías ir a Xochimilco.
Lo mismo pasa con una organización: aún si no sigues exactamente la ruta que tenías en mente, tienes que saber a dónde quieres ir y por qué quieres llegar ahí.
1. “Metas grandes y peludas”
Las “Big Hairy Audacious Goals” (les dicen “bihags”, por cómo se pronuncian sus siglas en inglés) son un concepto popularizado por Jim Collins y Jerry I. Porras por ahí de 1994: metas grandes, atrevidas y audaces que están diseñadas para inspirarte a lograr tus objetivos.
Las bihags no son una apuesta segura, son el sueño: “llegar a la Luna” para la NASA en los 1960s, “que sea normal tener un auto” para un Henry Ford que salía de su casa y sólo veía caballos…
Hay una probabilidad de entre 30% y 50% de que no logres tu bihag, pero está comprobado que vas a llegar mucho más lejos que si no te la hubieras planteado.
Un caballo saludando al conductor de un Ford
Collins y Porras encontraron que las organizaciones que se planteaban bihags superaban significativamente a sus pares en términos de rendimiento financiero y sostenibilidad a largo plazo.
Las empresas con bihags bien definidas también mostraron en promedio un crecimiento 16% más rápido, y tenían empleados y colaboradores más comprometidos y motivados.
(Muy) breve tutorial para redactar una buena bihag
1) Sueña en grande, pero de forma concreta.
Después de leer estos párrafos, quiero que te alejes un minuto de la pantalla y te imagines cómo quieres que se vea tu organización en diez años.
Piensa en una imagen detallada. Te levantas en la mañana: ¿a qué hora entras a trabajar?, ¿es remoto o presencial?, ¿cómo se ve la oficina (o el estudio, o lo que sea)?, ¿cómo se ve tu agenda?, ¿cómo es tu equipo?
¿Cómo se ve el mundo gracias a ti?, ¿qué opinan tus clientes?, ¿qué dice la gente?
Uno de los factores de éxito del bihag, es que venga acompañado de una imagen vívida. Un caso de libro de texto (no muy artístico, pero muy funcional) es el de Henry Ford:
“Voy a construir un auto motorizado para las masas (...). Cuando termine, todos podrán comprar uno, y todos tendrán uno. El caballo va a desaparecer de nuestros caminos, y el auto va a ser dado por hecho. (...) Tendremos un gran número de empleados, todos con buenos sueldos”.
Notas
Si te está gustando hacer estos análisis, clávate en qué son la misión y visión organizacionales.
Hay mucha confusión entre qué es una meta y qué es un objetivo incluso dentro de la disciplina administrativa. En la mayoría de las fuentes, la definición es la que te puse aquí: la meta es general, los objetivos son específicos; la meta es hacer un cohete, el objetivo es terminar el motor de aquí al viernes.
En algunas otras, es prácticamente al revés: el objetivo es general, las metas son específicas.
Mi hipótesis es que esta confusión viene de que el autor Peter Drucker estableció una metodología empírica llamada “administración por objetivos”, en la que definía a los objetivos como estratégicos y de largo plazo, y a las metas como programas y operaciones que ocurrían cada cierto tiempo (cada año, cada semana…), pero en prácticamente cualquier otro libro de administración, te explican que la meta es estratégica y general, y los objetivos son específicos...
El punto es prácticamente el mismo, sólo es la terminología la que causa confusión.
Fuentes:
Collins, J.C., & Porras, J.I. (September-October 1996). Building your Company’s Vision. Harvard Business Review.
Collins, J. C., & Porras, J. I. (1994). Built to Last: Successful Habits of Visionary Companies. HarperBusiness.
Collins, J. C. (2001). Good to Great: Why Some Companies Make the Leap... and Others Don't. HarperBusiness.
Locke, E. A., & Latham, G. P. (2002). Building a practically useful theory of goal setting and task motivation: A 35-year odyssey. American Psychologist, 57(9), 705-717.
2) Pasa el sueño a papel
Primero escríbelo completo, sin filtros, sin comas; tal cuál salga de tu imaginación. Nadie más va a leerlo, hazlo para ti — para concretar en imágenes concretas eso que ya soñaste de mil formas.
Ya que lo tengas listo, resúmelo en una o dos oraciones. Ponle puntos y comas, cuida cada palabra y detalle; haz varios borradores que odies hasta que termines con uno que ames.
Esta es la versión que le vas a contar a los demás. Por ejemplo:
"Democratizar el automóvil".
(Ford Motor Company, 1900s)
Ejemplos famosos de bihags
Te dejo algunos ejemplos famosos que pueden servirte de inspiración:
De objetivos
“Democratizar el automóvil” (Ford Motor Company, 1900s)
“Ser una empresa valuada en $125 millones de dólares para el año 2000” (Wal-mart, 1990)
“Ser una empresa reconocida por cambiar la imagen de que los productos japoneses son de mala calidad” (Sony, 1950s).
David contra Goliath
Destruir a Adidas (Nike, 1960s)
Yamaha wo tsubusu! (Destruir a Yamaha) (Honda, 1970s)
“Ser el ______ de (mi área)”
“Ser el Harvard del Oeste” (Stanford University, 1940s)
“Ser el Nike del ciclismo” (Giro, 1986)
Internos
“Ser el número uno (o dos) en cualquier mercado al que entremos. Revolucionar esta compañía para que tenga las fortalezas de una gran empresa, pero la flexibilidad y agilidad de una pequeña” (General Electric Company, 1980s)
“Que esta división pase de ser poco respetada a ser la más admirada, emocionante y buscada dentro de esta compañía” (División de componentes dentro de una empresa computacional, 1989)
3) Traduce tu bihag a metas
Ya que tienes la película completa, toma algunas fotos.
¿Cómo se traduce tu bihag en metas a largo plazo?, ¿cómo tendrían que verse las cosas de aquí a uno o dos años para que tu sueño se vea un poco más cercano?
Si el bihag es “demostrar que el metal mexicano tiene un sonido propio, capaz de competir internacionalmente”, podrías desmenuzarlo en, por ejemplo, las siguientes metas:
Que en un año…
Mi banda tenga un sonido único, de alta calidad, resultado de fusionar la música que crecí escuchando a mi alrededor con lo que más amo del metal.
Mi banda tenga una imagen y una narrativa que resalte lo que mi música quiere comunicar, sin caer en clichés ni caricaturas.
El sonido de mi banda sea respetado por las bandas locales por su calidad técnica, y por las bandas internacionales por cómo se diferencía el sonido de lo que escuchan en sus propios países.
El "Horsemobil" de Clinton Folger
Piensa en tu "bihag" como el boceto de una pintura que llevas días imaginando.
3. Desglosa tus metas en objetivos
Y aquí es donde comenzamos a aterrizar.
Vamos a la primera meta de nuestra banda de metal: "que en un año mi banda tenga un sonido único, de alta calidad, resultado de fusionar la música que crecí escuchando a mi alrededor con lo que más amo del metal".
¿Cómo se te ocurre aterrizarla? Yo pienso en:
De aquí a dos meses, tener un calendario constante de, mínimamente, un ensayo a la quincena de forma remota, e idealmente, un ensayo presencial a la semana.
De aquí a cuatro meses, haber terminado de componer al menos ocho canciones, de las cuáles al menos cuatro, e idealmente ocho, nos hacen sentir satisfechos y orgullosos.
En cuatro meses, poder tener un ensayo con cinco invitados especiales que comprendan nuestra visión, y que sean capaces de darnos retroalimentación (compasiva pero realista) para lograrla.
En máximo seis meses, tener al menos cuatro canciones que nos sintamos listos para grabar en estudio, en menos de dos horas (por canción), con una alta calidad interpretativa y técnica.
4. Juega en equipo
Si estás en una organización, lo ideal es que todo esto lo hagas con esos miembros de tu equipo que suelen ayudarte (o frenarte) al tomar decisiones.
No va a servir de nada que tu trabajo aquí sea impecable si va a haber alguien resistiéndose consistentemente a que tu visión se haga realidad.
Para tu equipo, ¿qué significa el bihag que planteaste?, ¿cuál es su propia versión de él?, ¿qué metas y objetivos tienen que plantearse a nivel individual para que ocurra?
Si en máximo seis meses hay que tener al menos cuatro canciones listas para ser grabadas, y Juanito aún tiene problemas tocando sus solos de guitarra, Juanito tendrá que ponerse metas y objetivos individuales para que el equipo lo logre: ensayar al menos media hora diaria, tomar clases una vez a la semana, etc.
5. Sé compasivx contigo mismx
Son metas grandes y peludas por un motivo: tienen dientes, tienen garras, dan miedo.
Aún cuando tienes a los objetivos para ayudarte a acariciarles el lomito (y luego salir corriendo), es normal que soñarlas e intentarlas dé miedo, y va a ser normal que te equivoques, te retrases o quieras replantear todo a medio camino.
Haz tu mejor esfuerzo (y tampoco te engañes, neta haz tu mejor esfuerzo), rétate a lograr la mejor versión, y date una palmadita en el hombro por siquiera intentarlo.
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